Salud

Cómo dormir con tu celular afecta tu sueño

  • 26 septiembre, 2023
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Santo Domingo.- La rutina a la hora de dormir para muchos de nosotros suele ser: ponerse el pijama, apagar las luces, meterse en la cama y luego… coger el teléfono móvil. Dormir bien es fundamental para la salud física y mental, y usar el teléfono en la cama puede dificultarlo. Sigue leyendo para enterarte de cómo dormir con tu celular afecta tu sueño.

La luz azul es perjudicial para tus ojos.

La luz azul emitida por la pantalla de tu teléfono celular restringe la producción de melatonina, la hormona que controla el ciclo de sueño-vigilia (también conocido como ritmo circadiano). Esto hace que sea aún más difícil conciliar el sueño y despertarse al día siguiente. El ritmo circadiano parece ser especialmente sensible a la luz azul ya que tiene una longitud de onda corta.

Mantiene tu mente ocupada.

Cuando llega el momento de apagar las luces e ir a dormir, lo último que nuestro cerebro necesita es más información y estimulación. Revisar tu teléfono estimula tu cerebro, estás más activo y despierto. Incluso una simple mirada rápida puede activar el cerebro y retrasar el sueño. Tu mente puede permanecer activa y comprometida mucho después de haber navegado por las redes sociales o haber respondido algunos correos electrónicos del trabajo.

Compromete el estado de alerta a la mañana siguiente.

Dado que pasaste ese tiempo adicional permaneciendo despierta leyendo correos electrónicos en lugar de dormir, ahora estarás más cansada y menos alerta para el día siguiente. ¿Y quién quiere estar menos consciente y más lenta a lo largo del día? Aparte del hecho de que usar el celular a altas horas de la noche puede hacerte menos eficiente, también puede provocar una deficiencia significativa y crónica del sueño.



Puede representar un riesgo de incendio o quemaduras.

Aunque es poco común y solo ocurre en incidentes aislados, existe el riesgo de que la batería de tu teléfono se incendie. Un incendio en la cama o la explosión de un teléfono pueden causar daños físicos importantes. Las investigaciones han descubierto que la quema o el sobrecalentamiento de las baterías han provocado varias quemaduras de segundo grado.

Entonces, ¿no puedes usar tu celular?

Si, pero no tanto. Los estudios muestran que pasar dos o más horas frente a una pantalla por la noche puede alterar gravemente el aumento de melatonina necesario para conciliar el sueño. El reloj biológico en adultos sanos sigue un ciclo de sueño-vigilia de 24 horas. Debido a la duración de nuestro reloj interno, nuestro cuerpo tiene una tendencia natural a retrasar el horario de nuestro sueño.

Esto significa que siempre nos resulta más fácil acostarnos más tarde y despertarnos más tarde. Cuando afuera hay luz, la gente se vuelve más alerta. A medida que disminuye la luz del día, el cuerpo libera una hormona, la melatonina, que produce sensación de somnolencia. Los teléfonos inteligentes, las tabletas, las computadoras, las pantallas de televisión y algunos lectores electrónicos emiten luz azul de longitud de onda corta muy similar a la luz solar.

La luz azul también puede reducir la cantidad de tiempo que pasas en el sueño de ondas lentas y de movimientos oculares rápidos (REM), dos etapas del ciclo del sueño que son vitales para el funcionamiento cognitivo. Considera apagar todos los dispositivos electrónicos al menos una hora antes de dormir, como mínimo.

Prueba leer un libro, darte un baño o realizar algún otro tipo de actividad relajante. Si debes utilizar un dispositivo con pantalla por la noche, reduce tu exposición a su luz brillante bajando el brillo al final de la noche. Existen programas descargables que pueden ayudarte a ajustar el brillo de la pantalla según la hora del día.

Ciertos tipos de iluminación doméstica también pueden afectar la producción de melatonina durante la noche. Un estudio encontró que la iluminación brillante del dormitorio puede disminuir la producción nocturna de melatonina hasta en 90 minutos en comparación con la iluminación tenue.

Mejora tu sueño

Los buenos hábitos de sueño (a veces denominados “higiene del sueño”) pueden ayudarte a dormir bien por la noche. No estás condenada a dar vueltas en la cama todas las noches. Por eso te dejamos estos tips para que duermas mejor.

Se consistente.

 Acuéstate a la misma hora todas las noches y levántate a la misma hora todas las mañanas, incluidos los fines de semana. No reserves más de ocho horas para dormir. La cantidad de sueño recomendada para un adulto sano es de al menos siete horas. La mayoría de las personas no necesitan más de ocho horas en cama para descansar bien.

Presta atención a lo que comes y bebes.

No te vayas a la cama con hambre o llena. En particular, evita las comidas copiosas un par de horas antes de acostarte. La incomodidad puede mantenerte despierta. La nicotina, la cafeína y el alcohol también merecen precaución. Los efectos estimulantes de la nicotina y la cafeína tardan horas en desaparecer y pueden interferir con el sueño.

Invierte en mejores colchones y ropa de cama.

Tener el mejor colchón para tus necesidades y preferencias es vital para asegurarte de que te sientas lo suficientemente cómoda como para relajarte. Invertir en un colchón y una almohada con apoyo ayuda a garantizar que tu columna reciba el apoyo adecuado para evitar dolores y molestias.

Crea un ambiente tranquilo.

Asegúrate de que tu dormitorio sea tranquilo, oscuro, relajante y tenga una temperatura agradable. La exposición a la luz por las noches puede dificultar conciliar el sueño. Como dijimos, evita el uso prolongado de pantallas emisoras de luz justo antes de acostarte. Considera usar cortinas que oscurecen la habitación, tapones para los oídos, un ventilador u otros dispositivos para crear un ambiente que se adapte a tus necesidades.


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Bienestar

¿Sufres de insomnio? Entérate de las consecuencias que podría traer a tu salud

  • 29 junio, 2022
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El insomnio es el trastorno del sueño más frecuente, presentar dificultad para conciliar y mantener el sueño, despertares frecuentes, más temprano de lo usual y no poder retomar el sueño nuevamente por más de tres noches en una semana, es señal de insomnio agudo. No buscar ayuda a tiempo podría tener consecuencias irreversibles a la salud. Por esto y mucho más, hemos citado al Dr Erick Alcántara, especialista en Medicina del sueño y director de la Clínica del sueño Medicsleep, para que nos comparta sus conocimiento profesionales sobre este mal que afecta a millones de personas alrededor del mundo.

El doctor asegura que nuestra salud cardiovascular, cerebral y metabólica depende de nuestra calidad del sueño.  El sueño juega un papel fundamental en la comunicación de las células nerviosas, lo que nos permite concentrarnos y reaccionar rápidamente, es esencial para la memoria.

Además de optimizar las funciones cognitivas, influye mucho en nuestra salud emocional. El sueño inadecuado se asocia múltiples síntomas diurnos como irritabilidad, fatiga, hipersomonolencia excesiva diurna, así como con una mayor susceptibilidad a la depresión, la ansiedad y otras enfermedades mentales.

El insomnio no solo puede minar tu energía y estado de ánimo, sino que también puede afectar tu salud, desempeño laboral y calidad de vida.



Portal de Salud, Mayo Clinic

El sueño es esencial para la salud de nuestro sistema inmunológico y puede ayudar a protegernos de enfermedades.  La falta de sueño está relacionada con una menor inmunidad y un aumento de la inflamación, lo que nos hace más susceptibles a los resfriados comunes y otras enfermedades infecciosas.

Alcanta afirma que dormir entre 7 y 8 horas ayuda a regular el apetito, haciéndote menos propenso a comer en exceso y aumentar de peso. 

Síntomas

Según el portal de salud Mayo Clinic, los síntomas pueden incluir lo siguiente:

  • Dificultad para conciliar el sueño a la noche
  • Despertarse durante la noche
  • Despertarse muy temprano
  • No sentirse bien descansado después del sueño nocturno
  • Cansancio o somnolencia diurnos
  • Irritabilidad, depresión o ansiedad
  • Dificultad para prestar atención, concentrarse en las tareas o recordar
  • Aumento de los errores o los accidentes
  • Preocupaciones constantes respecto del sueño

Complicaciones

  • Puedes padecer de obesidad y diabetes tipo 2.
  • Peor desempeño en el trabajo o en la escuela.
  • Disminución del tiempo de reacción al conducir y un mayor riesgo de accidentes.
  • Trastornos de salud mental, como depresión, un trastorno de ansiedad o abuso de sustancias.
  • Aumento del riesgo y la gravedad de enfermedades o afecciones a largo plazo, como presión arterial alta y enfermedades cardíacas.

 

Así que ya sabes, si el insomnio dificulta tu desempeño durante el día, consulta con tu médico de cabecera lo antes posible, para identificar la causa de tus problemas para dormir y encontrar la manera de tratarlos. Si el médico cree que tal vez tengas un trastorno del sueño, podría derivarte a un centro del sueño para que te realicen los estudios especiales pertinentes.

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Familia

Si cantas “Duérmete niño, duérmete ya”, este artículo es para ti

  • 7 octubre, 2019
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¿Cuándo dormirá mi bebé toda la noche? ¿Por qué se despierta cada cinco minutos? ¿Es mejor que se duerma en el seno o con el biberón? Estas son algunas de las preguntas más frecuentes que recibe Montserrat Bordas, educadora , psicóloga, doula postparto, coach de padres y especialista en sueño infantil, con quien conversamos de este tema. !No te pierdas lo de los sonidos blancos!

Para empezar, y durante toda la plática, enfatizó que cada bebé es diferente, con una personalidad propia y que eso influirá en el sueño del infante, al igual que la ansiedad y el estrés que le puedan transmitir los padres.

Entonces, ¿no sabremos cuándo volveremos a dormir la noche completa?

Sí. De acuerdo con Montserrat, algunos empiezan a dormir la noche entera a los cuatro o seis meses, pero hay otros que pueden durar hasta dos o tres años para lograrlo. Detalla que depende del niño, y debe ser sin la intervención de los progenitores. Una investigación afirma que el sueño no es un proceso que se pueda forzar.

“Que el niño comience a dormir la noche completa depende en su gran mayoría de la rutina familiar y cómo los padres manejen la rutina del sueño”.



Montserrat Bordas

3:30AM, el sueño más bueno y de repente: el bebé despierta ¡Por qué!

Para continuar, Montserrat nos explica: “Una noche completa para un bebé equivale a cinco horas corridas, entonces la expectativa de un adulto de que dure al menos nueve o seis horas, está mal”.

Añade que todos despertamos durante la madrugada, la diferencia es que los mayores cambian de posición y siguen durmiendo, pero los más pequeños necesitan alimento o saber que sus padres están cerca.

“No hay un margen o razón específica por la cual cada niño se despierta…”

Montserrat Bordas

La especialista hace la salvedad que “hay bebés que te pueden dar incluso hasta 10 horas de sueño, pero hay que tener en claro algo, durante ese lapso él despertó y siguió durmiendo sin asistencia de los padres”.

El colecho (cuando el bebé duerme en la cama con los padres)

La Academia Americana de Pediatría y la Academia Canadiense de Pediatría indican que el colecho está contraindicado cuando es compartiendo la misma cama, por el riesgo de que la mamá o el papá aplasten el bebé o se asfixié con una almohada. Sin embargo, Montserrat dice que dicha investigación se basó en el riesgo que conlleva que el infante duerma con adultos que consuman pastillas para el sueño.

Aprovechó para contrarrestar la información afirmando que esta práctica tiene muchos beneficios, como el fomento de la lactancia materna y que los padres no tengan que trasladarse a otra habitación para cuidar al bebé cuando despierte.

Resalta, además, que los primeros cuatro meses del niño fuera del útero son para estar como un canguro, mínimo hasta los seis meses. Durante ese tiempo “necesitan apego, seguridad y movimiento”.

Para aquellos que están en contra de dormir con el niño en el mismo espacio, Montserrat advierte que al llevarlo a una habitación solo, lo están forzando a una independencia prematura “que no está bien”.

Tomando como ejemplo la cultura japonesa, donde los niños duermen con los padres hasta los seis años, la coach explica que la independencia se logra de día, no de noche. Agrega que le “cuesta ver a un adolescente que duerma con sus padres… llega un momento donde el niño quiere su independencia innata, no presionada”.

Entonces ¿sí o no?

“El método correcto sería que el niño duerma en la habitación con la madre, el padre, pero en su propia cuna”, dice Montserrat.

Diversas formas para que se duerma

“La clave en cuanto al sueño del bebé no es que se duerma solo, es tener diversas rutinas para el sueño: en el seno, en el carro, en los brazos, con la abuela, con la tía o el papá”.

Cuando él aprende que hay diversas maneras, lugares y dinámicas entonces no está condicionado a que solamente lo hará de una manera, aunque hay que tener en cuenta que siempre va a preferir a la mamá”, explicó.

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Monserrat afirma que “malas rutinas durante la infancia, las negativas” son un factor relevante cuando se  habla de problemas de sueño en adultos que necesitan somníferos.

En sus años de experiencia, dice que el instinto e intuición materna son de suma importancia para entender a los infantes durante ese proceso.

Sonidos blancos, un método para ayudar a dormir

“Cuando el bebé está en el útero de la madre tiene muchos sonidos blancos o naturales. Puede sentir los latidos del corazón de la mamá, el líquido amniótico y los que provienen del sistema digestivo”. Estos sonidos ayudan a bajar la ansiedad del infante, a adaptarse, sentirse más cómodo y le ayudan dormir.

Este tipo de ruido es el ideal para enmascarar o tapar otros sonidos provenientes del ambiente, como autos, una construcción o el ladrido de un perro que pudiera despertar al infante.

Ejemplo:

¿Horario o rutina de sueño?

La psicóloga hace la aclaración que “lo importante son las rutinas de sueño, no los horarios”. Esto quiere decir que si al niño le dan la cena y luego lo llevan a la cama a dormir, él va creando un hábito.

“Hay que saber identificar cuando el niño tiene sueño y no guiarse de que ya es la hora de dormir. Si tiene sueño: vamos a dormir”. También hace énfasis en que las siestas son durante el día y el acto de dormir se da en la noche. Él puede estar acostado hasta 15 minutos, y “para él eso es una siesta”.

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“Para los recién nacidos todo es aleatorio, o sea, no hay un horario para que se duerman”.

Montserrat Bordas

Otro dato interesante es que los bebés lactados pueden al mes identificar el día y la noche, porque se les transmite la hormona del sueño con mayor rapidez. “Los que consumieron fórmula les puede costar un poco más”.

Un estudio de la Asociación Española de Pediatría corrobora esta información, explicando que la leche materna contiene endorfinas, sustancias que inducen al sueño.

Cuando un bebé nace, la vida de los padres y de todos los que se involucren en la crianza de ese nuevo ser cambia radicalmente. Su rutina de sueño no debe ser un problema. Recuerda: él tiene personalidad propia y, en vez de moldearlo a tus parámetros, regálate la oportunidad de aprender a conocerlo poco a poco.

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