Mujeres de Poder

Madeline Ceballos y el gotero que cambió su vida y carrera

  • 31 marzo, 2025
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Un emprendimiento puede ser un proyecto que planeamos durante años, o simplemente algo que surge naturalmente como producto de nuestro ingenio en un momento culminante de nuestras vidas. Así, lo que en algún momento fue un gotero natural para el crecimiento y uso personal de Madeline Ceballos, se convirtió en el producto estrella y el origen de MAKA, toda una marca enfocada en la salud capilar. Te contamos cómo Madeline asumió el reto de crear una marca en una etapa de su vida en la que pensaba que ya lo había logrado todo, demostrando que nunca es tarde para plantearse nuevas metas y conquistar nuevos sueños.

RE: ¿Qué te inspiró a emprender y cómo comenzaste MAKA? 

MC: La inspiración fue muy orgánica y algo inesperado. La necesidad surgió a partir de una situación personal con mi salud capilar. Tuve que cortar todo mi cabello debido a una técnica que me lo quemó, y al no encontrar un producto en el mercado que resolviera mi problema, decidí crear uno para mi uso personal. Probé de todo durante un año y medio sin resultados, pero mi fórmula, en solo tres meses, logró lo que ningún otro producto había hecho. 

Cuando mi cabello comenzó a crecer, la gente me preguntaba qué estaba usando. Comencé a regalar el producto porque nunca lo hice con la intención de emprender. Todo se fue dando de manera paulatina y orgánica. Posteriormente, fue mi hija Carla quien me empujó a emprender. Recuerdo que cuando me hicieron mi primer pedido, personas cercanas a mí, no sabía ni qué precio ponerle al producto. Puedes imaginarte lo poco preparada que estaba para emprender. Sin embargo, comencé y fue un aprendizaje constante. Todavía sigo aprendiendo y me considero una aprendiz de la vida. 



Madeline Ceballos junto a sus hijas Karla y Lisa.

Lo que comenzó con un solo producto en mi casa y con la ayuda de dos personas, hoy es una empresa. No fue planificado, pero tenía muy claro que, fuera lo que fuera, lo haría con excelencia. 

RE: ¿Cuáles fueron los mayores desafíos al lanzar tu marca y cómo los superaste? 

Al no tener una planificación estructurada, crecí muy rápido en poco tiempo y eso fue muy retador. No estaba preparada para el crecimiento ni el reconocimiento que la marca tuvo tan rápidamente. 

Recuerdo que muchas veces dije: «No quiero un local», «No quiero emplear personas», «No quiero constituir una compañía». Y todos esos «no» se convirtieron en «sí» porque el crecimiento me sacó de mi zona de confort. Me di cuenta de que, si no daba el paso, iba a morir de éxito. 

Pasé de tener una vida tranquila y sin muchas complicaciones a emprender, lo que representa un gran reto. Quienes han emprendido saben de lo que hablo. Muchas veces se ve la idea de «ser tu propio jefe» como algo ideal, pero la realidad es que no hay horarios. El horario te maneja a ti, porque todas las responsabilidades recaen en ti. 

Hubo momentos en los que he querido tirar la toalla, pero he aprendido que en cada reto hay un aprendizaje y una gran oportunidad. Saber que todo es un proceso y que cada situación complicada me ayuda a crecer, me ha permitido seguir adelante. 

RE: ¿Cómo manejas el síndrome del impostor y la autocrítica?  

MC: Soy una persona perfeccionista y controladora, lo que en el fondo es miedo. Aún hoy tengo que trabajar en ello. En situaciones retadoras, esa voz interna me dice: «¿Realmente crees que puedes con esto?». Para apagar esa vocecita, miro atrás y reconozco mi recorrido. Si estoy aquí hoy, es porque algo he hecho bien. Me concentro en el proceso, no solo en el resultado. Aprendí a soltar el control y entender que todo es perfecto tal como es. Eso me ayuda a fluir, a confiar en mí y en mi capacidad. 

RE: ¿Cuál consideras tu mayor logro profesional hasta ahora?  

Mi mayor logro ha sido mantener la marca en el gusto y la preferencia del mercado dominicano. Es un reto constante, que requiere trabajo, constancia, esfuerzo, dedicación e innovación. Nosotros no solo vendemos productos; vendemos autoestima, conocimiento y experiencia. Educamos a las personas sobre salud capilar y desmentimos mitos. Lo que hacemos impacta la vida de las personas, porque cuando alguien se siente bien con su apariencia, eso influye en su confianza y en cómo se proyecta ante el mundo. 

RE: ¿Cómo podemos desarrollar una mentalidad de crecimiento y adaptabilidad? 

Todos tenemos dones y talentos, pero estamos muy distraídos. La mayor pandemia de este siglo es la desconexión con nosotros mismos. La clave es descubrir nuestra esencia y conectar con lo que realmente queremos. 

Me ha tocado adaptarme muchas veces: he cambiado de país, he tenido que hacer ajustes importantes en mi vida, y aunque a veces nos resistimos al cambio, cuando estamos conectados con nosotros mismos, el entorno deja de afectarnos de manera negativa. 

También, tener mentores en distintas áreas ha sido clave para mi crecimiento. Me mantengo siempre en constante aprendizaje. 

RE: ¿Qué estrategias recomiendas para innovar y mantenerse relevante en el mercado? 

Lo más importante para mí es estar siempre atenta a qué quiere el mercado, qué necesita y en qué momento lo pide. Me considero una servidora de la gente, por lo que observo cómo los consumidores perciben el producto. Me di cuenta de que había un segmento que veía MAKA como algo aspiracional, pero no siempre podía adquirirlo. Ahí surgió MAKA Essentials, una línea de cuidado diario que conserva nuestra calidad, pero a un precio más accesible. 

Nos dimos a conocer como una marca especializada en anticaída y crecimiento capilar. Sin embargo, MAKA Essentials vino a suplir todo lo relacionado con el cuidado diario del cabello, convirtiendo la rutina capilar en un ritual de belleza y amor propio. Logramos ampliar la variedad de productos sin perder la esencia ni la calidad. La respuesta del público ha sido impresionante, logrando que más personas disfruten de la experiencia MAKA.

Madeline Ceballos y sus hábitos detrás del éxito

RE: ¿Cómo es un día típico en tu vida profesional? 

MC: Mis días nunca son iguales, lo cual disfruto mucho porque me permite mantenerme en constante movimiento. Sin embargo, hay ciertas cosas que mantengo como rutina. Al despertar, lo primero que hago es tomar agua con limón y sal tibia. No tomo el celular durante la primera hora; en su lugar, leo, medito y hago ejercicio. Cuando no sigo este proceso, siento que mi día no fluye igual. 

Después del ejercicio, empieza mi jornada laboral. Me gusta trabajar en la oficina porque tengo más estructura y concentración. Aunque a veces paso poco tiempo allí, intento estar de lunes a jueves. Trabajo en familia, así que almorzamos juntos en la oficina, lo que nos ayuda a aprovechar mejor el tiempo y me permite liberar los viernes para dedicarme a mi familia y a mí misma. 

Al final del día, disfruto estar en casa. Mi mejor plan es bañarme, ponerme cómoda y ver una serie para desconectarme. Es una forma de reiniciar mi mente y liberar el estrés acumulado. 

RE: ¿Cómo equilibras tu vida personal y familiar con tus responsabilidades laborales? 

MC: El equilibrio absoluto no existe. En cada etapa de mi vida, ha habido momentos donde una cosa debía tener más prioridad que otra. Cuando mis hijos eran pequeños, el desbalance lo asumía yo para que ellos estuvieran bien. Ahora que son adultos, mis prioridades han cambiado. 

Trabajar en familia me ayuda a no descuidarlos, aunque dentro de la empresa cada quien tiene su rol. En casa, mi vida ha cambiado tanto que hasta evito ir al supermercado; tengo personas que me ayudan con eso. Esto me permite enfocarme en lo que realmente disfruto y me hace feliz. 

La clave está en elegir bien las batallas. No sabemos cuánto tiempo estaremos aquí, así que intento encontrar momentos de felicidad cada día, sin esperar a que llegue el «momento perfecto». 

RE: ¿Cuáles son las rutinas más efectivas para mantener el enfoque y la productividad?  

MC: Lo primero es la organización. Delegar ha sido clave para evitar sobrecargarme y poder enfocarme en lo realmente importante. En mi trabajo, cada quien tiene responsabilidades definidas y eso me permite trabajar de manera más eficiente. No intento hacer demasiadas cosas en un día. Prefiero enfocarme en tres a cinco tareas clave en lugar de dispersarme en muchas y no hacer ninguna bien. También divido mi tiempo en bloques: algunos para reuniones, otros para innovación y otros para la creación de contenido, ya que también soy la imagen de la marca. 

RE: ¿Qué hábitos personales son clave para tu crecimiento profesional?

MC: Antes vivía en piloto automático, pero con el tiempo he aprendido que las crisis llegan para enseñarnos algo. Cada una de ellas me ha despertado y me ha dado herramientas para estructurar mi vida con más enfoque. No soy la misma persona que hace cinco años, ni siquiera la de hace diez años. 

Honrarme a mí misma ha sido fundamental. No puedo dar lo que no tengo, así que primero me cuido a mí para poder dar lo mejor a mi familia, mi trabajo y mis clientes. La ética y la honestidad son valores esenciales en mi vida, y todo lo que hago se basa en ellos. 

Otro pilar es tener un enfoque claro. A veces hay cosas que no quiero hacer, pero sé que son necesarias para lograr mis metas. Esa disciplina es lo que me ha permitido seguir creciendo. 

RE: ¿Qué consejo les darías a las mujeres que aspiran a emprender?

MC: Primero, es fundamental que descubran cuál es su talento y lo alineen con su propósito de vida. Todos estamos aquí por una razón y nuestro trabajo debe impactar la vida de alguien más. Emprender no es solo para generar ingresos; es una forma de servicio. También deben entender que emprender no es para todo el mundo. No hay una opción mejor entre ser empleada o emprendedora, simplemente es una decisión de vida. Lo importante es disfrutar lo que se hace, sin caer en el estrés y la ansiedad constante. 

Además, deben elegir bien en qué invertir su tiempo y energía. La vida es corta y, al tomar conciencia de esto, aprendí a elegir mejor mis batallas. Nadie sabe cuánto tiempo tiene, así que debemos enfocarnos en ser felices y hacer felices a otros a través de nuestro trabajo. 

RE: ¿Cuál ha sido el mejor consejo de liderazgo que has recibido?

MC: Aprender a delegar. No podemos hacerlo todo, y mucho menos hacerlo bien si estamos sobrecargados. Contar con un equipo de personas capacitadas, aunque ganen más que tú en ciertas áreas, es una inversión clave para el crecimiento. Si queremos llegar lejos, no podemos hacerlo solos. Rodearnos de personas que sumen y aporten es lo que garantiza el éxito de cualquier emprendimiento

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