Entre el trabajo, los niños, las facturas, desinfectar todo en casa, tener vida social, hacer ejercicio, bueno en fin efectos de cuarentena, debemos hacer una pausa para relajarnos y hacer un poco de meditación.
Omm… el estrés no acabará conmigo, omm…
El estrés y la ansiedad, cuando son constantes, pueden tener graves consecuencias para nuestra salud física y mental. A corto plazo, aceleran el ritmo cardíaco y aumentan la presión arterial. A largo plazo, afectan el funcionamiento de tu mente y el sistema inmunológico.
Aunque es una tarea casi imposible eliminarlos al 100% de nuestra vida (un poco de estrés es bueno), la meditación es una manera efectiva de combatirlos. Y cualquiera puede meditar :D.
Convierte la meditación en una rutina diaria. Mira los pasos que debes seguir.
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Qué tipo de meditación practicarás
Este es el primer paso, seleccionar qué tipo quieres practicar. Puedes explorar cada uno para encontrar el que más te guste.
Concentración: como su nombre lo indica, se trata de enfocar usando tus sentidos. Por ejemplo puedes detenerte a sentir tu respiración o algo tan sencillo como beberte una copa de té y concentrarte solo en esa acción.
Minfullness: esta proviene de una técnica budista. Se trata de escuchar tus pensamientos sin juzgarte.
Movimiento: es la forma de meditación, donde el movimiento es el guía. El yoga es una forma famosa de practicar este tipo, aunque una simple caminata con tu canción favorita puede lograr el mismo efecto.
Visualización: encontrar la calma interna por medio de la visualización de escenas positivas. La mente se enfoca en una imagen, que causa felicidad y paz.
Preparación
La meditación fomenta la atención plena, por esto es fundamental buscar un espacio tranquilo en casa, silencioso sin muchos objetos que te distraigan.
Para garantizar un momento de relajación, puedes ambientar el espacio con velas, flores, y un elemento esencial ¡música!
Aquí te compartimos un playlist de Spotify donde encontrarás melodías armoniosas que buscan la meditación.
La mente es el elemento que controla todo el proceso de meditación, a través de ella determinamos nuestra disposición. Prepara tu mente para que tu cuerpo te siga y esté consciente del momento solo para ti.
Ejercicios de meditación
Controlar nuestra respiración
Este ejercicio lo puedes realizar hasta por un minuto. Se trata de mantenernos en una posición cómoda, sentadas con las piernas cruzadas (clásica pose de meditación) e inhalar y exhalar continuamente con una respiración constante. Este ejercicio permite que nuestro cerebro reciba oxígeno, nos relaja y por supuesto ayuda a combatir el estrés.
Contar hacia atrás
Un conteo hacia atrás con números altos como 60 o 100 hasta llegar al cero. Recuerda mantener los ojos cerrados para mayor concentración.
Recorrido por el cuerpo
Aquí seremos conscientes de cada parte de nuestro cuerpo haciendo leves movimientos, como los pies, la cabeza, las manos y así sucesivamente.
Observación dinámica
Cuidado con distraerse chicas. Aquí abriremos los ojos lentamente, luego identificamos un objeto y los volvemos a cerrar. Este ejercicio busca una mirada distinta a las cosas, nos sirve para ver de otra manera nuestra propia casa y pertenencias.
Hay cientos de ejercicios, por eso te compartimos algunos cursos online de meditación para que los realices en casa: Taller introductorio , meditación para la ansiedad.
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