Salud

Cómo no excederte con las copas

  • 15 noviembre, 2023
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Santo Domingo.- En esta época de fiestas siempre hay mucho alcohol, y aunque tomar una o dos copas no tiene nada de malo, embriagarte puede no solo arruinar el evento, sino también tu reputación. A continuación te presentamos algunos métodos eficaces que te ayudarán a disfrutar de la velada sin caer presa de la intoxicación o de las lamentables resacas.

Nunca con el estómago vacío

Una de las primeras reglas sobre cómo manejar el licor es nunca beber con el estómago vacío. Considera disfrutar de una comida abundante antes de tu sesión de bebida o acompañar tus bebidas con algunos refrigerios o comida. A menudo se recomiendan alimentos ricos en carbohidratos y grasas, ya que ralentizan la absorción del alcohol y evitan que ingrese rápidamente al torrente sanguíneo.

Bebe lentamente

El cuerpo suele tardar una hora en procesar una bebida estándar. Si bebes rápido o bebes mucho, tu cuerpo no tiene el tiempo que necesita para hacerlo, lo que resulta en una acumulación de alcohol en el torrente sanguíneo. Beber tus bebidas lentamente para no exceder más de una bebida por hora es la mejor manera de no emborracharse.

Establece tus límites

Antes de comenzar a beber, decide cuántas bebidas tomarás y luego limítate a ese número. Los científicos han recomendado que no tomemos más de cuatro bebidas alcohólicas al día. La tolerancia de cada persona es diferente, así que elige un número que funcione para ti, en lugar de para tus compañeros.



Evita mezclar tus bebidas

Si bien las mezclas pueden agregar sabores interesantes a tus bebidas, también pueden provocar efectos inesperados, como emborracharte excesivamente o incluso provocar un desmayo. El arte de aprender a contener el licor implica ceñirse a una única opción de alcohol para la noche para evitar estos inconvenientes.


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Conmigo

¿Y si pruebas la sobriedad?

  • 11 junio, 2023
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Santo Domingo.- La nueva generación tiene una relación diferente con el alcohol. Cuando antes el dicho “No tienes que beber para divertirte” era solo de nerds y aburridos, ahora es aceptado como la realidad y la presión social para beber alcohol parece ser algo del pasado. Más y más personas adoptan la sobriedad, por un sinnúmero de razones. ¿Por qué hacen esto? ¿Deberías hacerlo tú? ¿Y si pruebas la sobriedad?

Todo comenzó con un desafío llamado «Dry January» en 2014, registrado por la organización benéfica Alcohol Concern en el Reino Unido. Los participantes se tomarían un mes de descanso del alcohol. De ahí muchas llegaron a la conclusión de que el alcohol no era algo necesario en sus vidas.

Algunas personas se vuelven sobrias en respuesta a los problemas que el alcohol ha infligido en sus vidas. Otras no beben simplemente por razones de salud. Tal vez nunca tuvieron un “problema” con el alcohol, pero están entrenando para una maratón o tratando de perder peso o iniciar un negocio, y la intoxicación o el consumo de alcohol de cualquier tipo no les funciona.

Para muchas de nosotras, el alcohol es una parte importante de nuestra vida social. Pero para otras, la idea de limitar el consumo de alcohol y reformular el estigma de no beber es atractiva. Algunos estudios encontraron que los millennials beben menos que otros grupos de edad, mientras que otro informe muy citado concluyó que la Generación Z bebía un 20 por ciento menos que los millennials.



Es caro, no les gustan los efectos y no lo ven como el lubricante social necesario que alguna vez fue entre las generaciones mayores. Los pronosticadores de tendencias han atribuido la creciente sobriedad al mayor movimiento de bienestar, sin embargo, algunos jóvenes simplemente han dicho que están cansados de beber tanto o incluso han optado por el cannabis y los psicodélicos en su lugar.

Esto ayuda a romper un estigma asociado con la sobriedad desde hace mucho tiempo, es decir, no es necesario ser alcohólico para estar sobrio. Los bares sin alcohol y las tiendas de bebidas sin alcohol están abriendo en ciudades de todo el mundo, apostando por las actitudes cambiantes hacia el alcohol.

¿Y tú? ¿Te atreves a probar la sobriedad?


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Cocina

La Gran Modelo: para compartir grandes momentos

Por Revestida

  • 15 abril, 2021
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la gran modelo

Santo Domingo.- Como una manera de sumar nuevos momentos de consumo y vivir grandes experiencias, Cerveza Modelo presentó al mercado local la Gran Modelo, una versión de su popular cerveza Modelo Especial, en una presentación de 21 onzas, ideal para compartir.

Detalles

-Nueva botella, en vidrio transparente, de 21 onzas.

-Botella retornable en los puntos de venta. 



-Clasificación de American Pilsner con 4.5 grados de alcohol.

-Tono dorado brillante, con sabor ligeramente cítrico, equilibrado con notas afrutadas y algunos matices herbáceos.

la gran modelo

La Gran Modelo está disponible a la venta en colmados y mediante su plataforma de e-commerce Colmapp. Actualmente puedes disfrutar de este nuevo formato en Santo Domingo y Santiago.

Cándida Hernández, Directora de Marketing de CND: “Apostamos por la constante innovación, que responde al surgimiento de nuevas tendencias de consumo en el país, sin perder la esencia de nuestra marca e impulsando al disfrute en conjunto del producto”. 

la gran modelo

Gracias a la versatilidad en sabores, calidad y más de 95 años de experiencia cervecero, Modelo, ha logrado posicionarse en los primeros lugares de preferencia tanto en el país, como en otros mercados internacionales. Hoy es, sin dudas, una de las marcas favoritas de los dominicanos.

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Familia

La alcoholización de nuestra juventud

  • 3 agosto, 2016
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Alcohol

He escuchado y sigo escuchando, de boca de adultos supuestamente responsables, ciudadanos honrados con cuentas bancarias, responsabilidades financieras y familiares, títulos universitarios y buenos empleos, personas que rezan antes de irse a dormir y van a la iglesia los domingos, repetir el siguiente estribillo: “Yo a mis hijos les enseño a beber.”

Y siempre me he preguntado en qué consiste ese pensum. ¿Cubren todo tipo de bebidas alcohólicas? ¿Hay exámenes? ¿Pruebines? ¿Con qué notas se pasa? ¿Con qué notas se queman? ¿Cómo es la clase? ¿Tipo conferencia, taller, laboratorio, o una combinación de las tres?

De una cosa estoy segura: las clases no están surtiendo efecto. O bien estos madres y padres maestros necesitan revisar sus técnicas, o la clase per se es una mala idea. La evidencia está a la vista de todos: pre adolescentes y adolescentes que deben ser hospitalizados por intoxicación; quinceañeros borrachos alardeando de su borrachera; fiestas escolares en casas de familia en donde los padres anfitriones ponen a disposición de sus invitados gran variedad de bebidas alcohólicas; fiestas de promoción de reconocidos colegios donde las mismas madres delegadas se ocupan de conseguir el alcohol que consumirán sus hijos; las fatalidades de tránsito, las adicciones, las promesas truncadas.



La razón que esgrimen estos pedagógicos adultos para suministrar alcohol a sus hijos e hijas menores de edad es un absurdo capital: “No se lo podemos prohibir, porque lo harán como quiera. Para que lo hagan en la calle, mejor que lo hagan en la casa”.

Se me ocurren otras muchísimas cosas que no le podríamos prohibir a nuestros hijos e hijas bajo el pretexto de que lo harán como quiera una vez estén en la calle: pasarse los semáforos en rojo, copiarse en un examen, vandalizar la propiedad pública, irrespetar la propiedad privada, contratar los servicios de prostitutas, resolver las diferencias recurriendo a la violencia verbal o física, ignorar los deseos y una chica que repetidamente te ha dicho que no. ¿Les enseñamos en casa cómo hacer todas estas cosas ya que, potencialmente, igual las harán en la calle?

Por supuesto, están los padres que rehúsan meterse en tantos jardines y se justifican más simplemente: “Siempre ha sido así, es lo normal aquí”. Tristemente, lo normal también es tirar basura en la calle, golpear a tu pareja sentimental, y acosar a las mujeres que caminan solas por la vía pública.

Nuestro país está alcoholizado y los mayores responsables son los padres y guardianes que han contribuido a normalizar el consumo de bebidas alcohólicas entre menores de edad. No existe fiesta de 15 años, reunión juvenil, juntadera, ágape, y kermés que pueda siquiera ser concebida sin la presencia de por lo menos cerveza. Comercios y expendios de todo tipo venden bebidas alcohólicas a menores de edad sin el menor reparo, un crimen por el que nadie vela y que no se castiga. Los medios, las familias, los padres, muchos centros educativos, la sociedad, en suma, se ha rendido ante la idea de que divertirse, de que pasarla bien, son equivalentes a beber alcohol.

Quizá lo que no entienden los padres y madres que les “enseñan a beber” a sus hijos es que no sólo los inician en el consumo de una sustancia que ocupa el puesto número siete entre las drogas más adictivas que existen — más adictivo que las benzodiazepinas y las anfetaminas normales, y un poco menos adictivo que los barbitúricos y el crystal meth —, sino que contribuyen de manera importante a perturbar el desarrollo del cerebro de sus hijos, el cual no termina en la adolescencia, sino que continúa bien entrada la joven adultez.

De acuerdo con la Academia Americana de Pediatría, el consumo de alcohol por jóvenes es una preocupación de salud pediátrica.

Ha sido científicamente comprobado que el consumo de alcohol a temprana edad está asociado a futuros problemas relacionados con el alcohol. Datos recabados por el National Longitudinal Alcohol Epidemiologic Study demuestran que el predominio de la dependencia alcohólica y el abuso del alcohol exhibe una disminución a medida que aumenta la edad del primer consumo. Jóvenes que empiezan a consumir alcohol a los 12 años y antes, muestran un 40.6 por ciento de predominio de dependencia alcohólica de por vida, mientras que para los que consumen alcohol a partir de los 18 años el predominio será de 16.6 por ciento. A partir de los 21 años el predominio disminuye a 10.6 por ciento.

Igualmente, el predominio de abuso del alcohol de por vida es de 8.3 por ciento para aquellos que comenzaron a consumirlo a los 12 años y antes, 7.8 por ciento para los que empezaron a consumirlo a los 18 años, y 4.8 por ciento para aquellos que empezaron a consumirlo a los 21 años.

A la vista de estos números, la actitud de muchos adultos frente al consumo de alcohol de sus hijos pasa de ser irresponsable e ignorante, a letal y delictiva. Que el alcohol se haya enquistado en muchas de nuestras prácticas culturales no lo hace menos dañino, y ciertamente no transforma por arte de magia en un agente inocuo e inofensivo. Al contrario: mientras más “normal”, “cultural”, e “idiosincrático” se le considere, más fácilmente podrá entrar en las vidas de nuestros hijos e interrumpir su buen desarrollo y su crecimiento.

Como sociedad siempre estamos prestos a corregir aquellos elementos de nuestro entorno que van en detrimento del buen orden de las cosas y de nuestra felicidad. El abuso del alcohol, sembrado en nuestros ciudadanos desde temprana edad precisamente por aquellos que están llamados a velar por su salud, es uno de estos elementos que ameritan revisión y corrección.

Nuestros hijos e hijas no necesitan “aprender a beber”; lo que necesitan es información confiable sobre los efectos del alcohol en sus cuerpos, articulada en el lenguaje de la prevención. Mucho cuidado la próxima vez que sientas la tentación de “enseñar a beber” a tu hijo o hija, porque lo más probable lo único que logres es condenarlos a los problemas que pretendías evitar.

Contacto: [email protected]

«Déjame Crecer» es una campaña sin fines de lucro que buscar orientar, informar y educar a padres, madres, educadores y la población en general sobre temas que afectan el desarrollo integral de nuestros hijos.

Wara González, M. Ed., Educadora, Directora General del colegio Kids Create y American School of Santo Domingo

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Belleza

Beneficios del consumo moderado de alcohol

  • 29 enero, 2016
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sex and the city fuente:web

Nos han acostumbrado que para celebrar debemos hacerlo con alcohol de por medio, aunque las ‘cosas’ en cierto modo no deberían de ser así. Pero ya que así son las ‘cosas’, la moderación debe ser nuestro aliado –eso es si no quieres una resaca o desinhibirte a tal punto que te arrepientas al otro día–.

Pero bien, ya basta de sermón, hablaremos de los beneficios que podrías obtener si lo tomas con moderación, o si lo paras por temporadas. Sí, es algo así como una temporada de desintoxicación.

Según los expertos en la piel, dígase los dermatólogos, el alcohol es un enemigo absoluto de nuestro órgano más grande: la piel.



cocktails

  • La hidratación se verá a simple vista. Mejorará su apariencia, menos arrugas, menos manchas y más elasticidad.
  • Control del acné. ¿Cuál es la razón? El alcohol acumula toxinas que pueden obstruir los poros y provocan la aparición del molestoso y antiestético acné.
  • Y uno de los males principales del consumo en exceso es el daño que le puede provocar a nuestros riñones e hígados. Por eso mejora nuestra salud interna
  • Además de resecar el cabello y el cuero cabelludo, el alcohol debilita la fibra capilar y provoca su caída, incluso puede agravar una alopecia. Un cabello más abundante y brilloso, a parte de ser por el trato que le das, también puede ser por moderarte con el vino y demás compañías. 
  • El más importante –al menos para las chicas– es que si moderas su consumo, podrás perder peso. Cuando estamos a dieta una de las principales cosas que nos vetan es el alcohol, y no es para hacernos la travesía de la dieta más pesada.

Es bueno tener en cuenta los beneficios que tienes con el consumo moderado, sigue disfrutando tu noche de solo chicas, donde los mojitos, sangrías y demás cócteles son parte de la velada, pero también piensa en tu cuerpo y aprende a tomar lo suficiente. 

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Cocina

Te invito a un ‘colajito’

Por Revestida

  • 2 enero, 2015
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La chef Claudia Fabián no es muy asidua a las bebidas alcohólicas. Esto inspiró a su esposo a prepararle una mezcla de sus dos bebidas favoritas: el refresco de cola y el mojito, dando lugar a una nueva bebida refrescante y dulce: el ‘colajito’. Ella te comparte su receta, para que compartas con tus amigos, pero con cautela, porque como todo trago dulce, «es traicionero».colajito, mojito, cola, cuba libre, soda, refresco, ron

 Ingredientes

Hielo // ron blanco // yerba buena // limón // azúcar // refresco de cola

 Preparación:



Sin categoría

Beer Tasting: aprendiendo sobre cervezas

  • 1 julio, 2013
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El mundo de las cervezas es un espacio diverso por su categorías, marcas y sabores, por lo que queremos compartir esta experiencia que puede convertirse en una excelente idea para compartir el día de los padres.

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July es más que una entusiasta de las cervezas, sean artesanales o industrializadas, conocerlas es su pasión. Ella nos ayudó a crear un perfecto BeerBQ para el día de los padres y también comparte interesantes informaciones para que te inicies en todo un mundo de sabores diferentes que ofrece esta bebida.



«Por referencia general, algo que mucha gente no sabe, sólo hay 2 tipos de cervezas: Ales y Lagers. Estas se diferencian porque las Ales son de fermentación alta y las Lagers de fermentación baja, generalmente las cervezas artesanales son Ales y las Lagers son más industrializadas.  En nuestro país, por ejemplo, solo tenemos Lagers.»

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Los llamados estilos de cervezas (rubia, trigo, pilsener, amber, porters, entre otros) son muchos y variados. Aquí los más conocidos:

Cerveza rubia: Las cervezas rubias tienden a ser de color claro y nítido, sabor  seco, con  amargura y aroma a lúpulo baja o media y un poco de dulzor de la malta. Sabores frutales pueden ser percibidos de la fermentación. Son de cuerpo ligero y rondan entre los 4 a 5 porciento de alcohol.

Cerveza de trigo: La Weissbier (en alemán: cerveza blanca) o también Weizenbier (en alemán: cerveza de trigo) es un tipo de cerveza típica de la región de Baviera, en el sur de Alemania.  Se caracteriza, sobre todo, por ser hecha no sólo con malta de cebada sino con una elevada proporción de malta de trigo, que le aporta una tonalidad blanquecina y un ligero sabor a vainilla que la distinguen.

Su grado de alcohol y su sabor tienden a ser suaves, por eso se le considera una cerveza óptima para las estaciones más calurosas. Una variante popular es el refresco veraniego «Russ» o «Russen», mitad cerveza blanca y mitad limonada.

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Cerveza strong ale: Generalmente  de color ámbar a cobre-marrón, las strong ales son cervezas inglesas condicionadas en la botella. Aroma y sabor complejos se manifiestan en las diferentes combinaciones de malta, ésteres afrutados y el alcohol, amargura suave pero perceptible por el uso de lúpulos ingleses, con un cuerpo medio. Deja una sensación generalmente suave y cremosa. 

Cerveza porter: Tiene un aroma malteado y la amargura del lúpulo. Es generalmente fuerte y oscura y es elaborada preferiblemente con aguas débiles. Se originó en Londres en el siglo XVIII como una mezcla de brown ale, pale ale y «stale» ale o añejo. Tiene alrededor de 6% de alcohol por volumen. El nombre viene de su popularidad entre los porteadores (porters) que trabajaban en los mercados de abastecimiento de Londres.

Popularmente, el porter está estrechamente relacionado con la cerveza stout, siendo esta la cerveza con más graduación de alcohol, de 7% a 8% de alcohol por volumen. Así, las porters más fuertes eran stout porters, lo que poco a poco se quedó simplemente en stout.

Cerveza Stout: Stout es el nombre de un estilo de cerveza tipo ale, muy oscura, originario de las Islas Británicas. Era el nombre utilizado para la cerveza más fuerte (stout), de 7% a 8% de alcohol por volumen. Aunque hoy en día, hay mucha más variedad y pueden ser más dulces o secas, y de 4% a 8% de alcohol por volumen.

La stout básica es una cerveza de color cercano al negro, amarga y elaborada con malta de cebada tostada. Este estilo fue popularizado mundialmente por Guinness. Sin embargo, existen muchas variantes de éste. Incluso Camra, la asociación británica de consumidores, excluye al Guinness en su definición de stout, al tratarse de un producto pasterizado y al cual se añade nitrógeno para asegurar que tenga su espuma característica.

EL MARIDAJE 

Si te fijas, no sólo puedes crear un encuentro con carnes, puedes maridar también con la preparación o con la salsas utilizadas, lo ideal es hacer un complemento entre la comida y la cerveza, siempre tratando de crear armonía entre los sabores.  ¡Ya queremos organizar un beer tasting para maridar exquisitos quesos!

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Rubia, Trigo: entrada o snacks. 
Quesos: Camembert, Brie, Queso de cabra con hierbas, Manchego, Stilton.
Snacks: Mini pretzels, nueces variadas, aceitunas, pepinillos, banana peppers, crackers, pan, pinchos de pollo, ensaladas.

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Ambers, Porter: Plato fuerte. Filete a la plancha, costillas de cerdo, hamburguesas, pollo y vegetales al grill, salchichas italianas.

Stout: Postres.
Soufflé de chocolate, chocolate negro, trufas de chocolate, tartas de strawberry y raspberry, flan de caramelo, crème brûlée, entre otros.

S’mores Cupcakes
S’mores Cupcakes

«Cuando maridamos debemos buscar esencialmente exaltar los atributos tanto de la comida como de la cerveza, eso lo hacemos eligiendo cervezas que completen con lo que ponemos en la mesa evitando siempre elegir combinaciones que opaquen los sabores entre sí. El balance y la armonía son clave».  July Peña

Orientaciones para degustar cervezas

Sigue a July (@julypeña) en Twitter y comparte esta pasión, ella con gusto te ayudará a conocer aún más.