Santo Domingo.- Todos hemos tenido una amistad de años que, de la noche a la mañana, ya no existe. Una amiga con quien dejamos de hablar un día y jamás volvemos a contactar. Aquel grupo inseparable del colegio, que de alguna forma logra separarse. Perder amistades es algo natural en la vida, sin embargo, no lo hace menos doloroso.
¿Te encuentras pasando por esta dolorosa situación? Sigue leyendo para saber cómo afrontar la pérdida de una amistad en nuestras vidas.
El impacto de la amistad
Los amigos tienen más efecto en nuestras vidas de lo que pensamos. Nos ayudan a afrontar momentos de adversidad, nos brindan memorias inolvidables, aumentan nuestra seguridad en nosotros mismos y lo que creemos, nos ayudan a socializar con otros grupos, nos enseñan a tolerar… etc. Crear amistades nos convierten en mejores personas, tanto hacia los demás como a nosotros mismos. Por esta razón, por todos las experiencias vividas y valores aprendidos, perder una amistad es una punzada difícil de asimilar.
¿Cómo podemos hacer el duelo?
Entonces, ¿existe una manera para superar esta pérdida?
- Aceptación: debemos aceptar que ya no existe una relación.
- Seguir adelante: en el caso de ser una amistad rota porque ambos evolucionan, es mejor pensar que el pasado ya pasó y vivir el ahora.
- Confrontación: despídete con afecto y deséale buena suerte al camino de tu amigo, sin rencores.
- Cambio de perspectiva: si perdiste una amistad a causa de traición, lo más sano es darse tiempo para asimilar la situación, todo el tiempo necesario. Luego, se debe cambiar la perspectiva y perdonar.
¿Podemos reconciliarnos?
Reconectar con una amistad siempre vale la pena. Te recomendamos analizar aquellos momentos que pasaron juntos y preguntarte a ti mismo: ¿Quiero tenerlo/a de vuelta? Luego, piensa en maneras en cómo puedes hacer el acercamiento, en donde ambos hablen sobre las dificultades de su relación y cómo superarlas. Si en realidad lo deseas, ¡esfuérzate y lucha por su amistad!
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