El impacto del golf en el inicio de la carrera de Tiger Woods, fue lo que motivó a Ricardo Ramírez a jugar este deporte. Paralelo a esta pasión, se ha formado como administrador de empresas con maestría en finanzas y más reciente en negocios. Un padre con una agenda llena de responsabilidades profesionales, sin embargo, con tiempo para lo que califica como su prioridad: su familia. “Todo lo que hago es por ellos y trato siempre de acomodar todo para no chocar con los compromisos de mi familia. Nada es fácil, pero con organización, todo es posible”, expresa.
Ricardo (hijo) y Paulina de 10 y 8 años de edad, respectivamente, son los retoños de Ricardo. Todo lo que hace es por y para ellos. Narra que el amor padre/hijo es enorme e inimaginable, pues “cargándolos, sentí tanto amor por ellos, que no pude evitar pensar en mis padres”. Con el pasar de los años te enseñan a ser paciente, a escuchar, a educar y a auto-educarse… Son palabras claves que Ricardo enumera como parte de lo aprendido en esta profesión de la que nunca se toma clases, sino más bien, se aprende en el camino. Estas dos personas (sus hijos) son las responsables de que pueda ver la vida desde muchos otros ángulos, y a apreciar la inocencia.
Fotografías: Roger Ramírez // Locación: Cayacoa Golf Club
Ramírez se describe como un padre responsable, ya que está bajo sus hombros no solo el darles amor, salud y educación, sino formarlos para que sean seres humanos de calidad. “Si serán exitosos será nuestra responsabilidad. Si son malos ciudadanos o políticos corruptos, será nuestra culpa. Nuestra responsabilidad es enorme e ineludible”.
Como golfista ha tenido la dicha de compartir esta pasión con sus hijos. Ricardo (hijo) fue involucrado en el golf desde muy temprana edad, y en el caso de Paulina, Ricardo (padre) no quería que se expusiera constantemente al sol en el campo, pero ella insistió en practicarlo; hoy en día no encuentra palabras para describir la satisfacción que siente de ver a sus hijos cumplir sus propias metas dentro de las reglas del golf, y que ellos reciban a tiempo completo todo el apoyo de sus padres para con esta disciplina.
Siendo la última de la familia en involucrarse en el deporte, Paulina ha logrado clasificar en el mundial, y según las palabras de su propio padre, todos (con abuelos incluidos) irán a acompañarla. Paulina cuenta con una familia que entiende perfectamente que los responsables de romper con estereotipos son los propios padres, expresando que: “Los roles han cambiado drásticamente en los últimos 50 años, y ya todos tenemos que hacer de todo”.
Ricardo cree que el golf es de los pocos deportes que te brindan la oportunidad de jugar y competir con otros jugadores sin importar sexo, tamaño o edad. En definitiva, creemos que el golf ha unido mucho más esta familia, que más que el amor, los valores y el respeto que se comparten, está la pasión por una disciplina en común.
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