El horario de trabajo moderno dificulta que en la hora del almuerzo consumamos los nutrientes que necesitamos. Este es quizás uno de los obstáculos más grandes que nos impiden llevar una vida saludable.
Según Julían Guerra, experto en nutrición y entrenador profesional, la dieta perfecta hace un equilibrio entre los carbohidratos, la buena grasa y las proteínas, tomando en cuenta que esta última es uno de los nutrientes más importantes para el cuerpo humano.
Inevitablemente, esto implica variar y balancear nuestras comidas diarias. He ahí el problema: encontrar un restaurante bueno, saludable y barato es difícil. Por otro lado, cocinar un plato diferente cada día, especialmente después de una larga jornada de trabajo, no es lo más divertido del mundo.
Afortunadamente, comer saludable no tiene que ser un proceso tan traumático o que demande tanto tiempo. Estas ideas pueden ayudarte a preparar tus comidas en menos de diez minutos y te ahorran pasar mucho tiempo cocinando tu almuerzo el día antes o empezar tu día demasiado temprano:
1- Lleva los ingredientes para una ensalada en una funda ziplock:
Corta los ingredientes de tu ensalada favorita y guárdalos bien sellados en una funda de ziplock, donde se mantendrán frescos una vez que los guardes en la nevera común de tu oficina. A la hora del almuerzo, sírvelos en un plato con un poco de sal y aceite de oliva, que debes llevar a parte, y listo: ¡hora de comer!
2- Sazona tus carnes los fines de semana:
Como explica Guerra, consumir proteínas es importantísimo para una buena dieta, lo incómodo es perder la noche (o despertarse de madrugada) a ‘cocinar esa proteína’. Puedes dedicar un poco de tiempo en el fin de semana y sazonar las carnes para guardarlas de nuevo en el refrigerador, ¡tendrás la mitad del trabajo hecho! Lo mejor es que puedes combinar estas carnes con tus ensaladas ‘en fundita’, tortillas o pan pita.
3- Prepara una pizza integral en el trabajo:
Sólo necesitas una tortilla o pan pita, albahaca, queso y salsa de tomate, cosas que puedes llevar empacadas sin ningún problema*.
A la hora del almuerzo, sirve sobre un plato que puedas llevar al microondas la pasta, el queso y la albahaca sobre el pan pita, corta en cuatro pedazos y calienta por un minuto. ¡Es una pizza integral!
*Puedes empacar la salsa de tomate en un envase separado y el queso llevarlo en una funda de ziplock (sí, son tus mejores amigas).