Santo Domingo. La familia nuestro primer círculo social directo. En ella aprendimos todos los elementos que hoy definen nuestra identidad como individuos. Por eso es importante educar en valores y entender que nuestros hijos o hijas serán individuos que provocaran un impacto en la sociedad en que se desarrollan.
Familia: célula de la sociedad
La familia es la célula madre de la sociedad, es la que determina las actitudes o comportamientos de cada persona que forma parte del entorno social. Como bien apunta la psicóloga Karem González, «es dentro del sistema familiar que el individuo va tomando los componentes de comportamiento, códigos sociales e interacciones interpersonales. Es también desde la familia que adquirimos noción de lo que es el respeto, el amor, el miedo, la vergüenza y jerarquía».
Lo que significa que, si una persona no recibió amor, no aprendió el valor del respeto, responsabilidad, le resultaría complicado ponerlo en práctica en la convivencia externa a la familia. Por que lo que no aprendimos o no se nos dio en el seno familiar, no será parte de los componentes de comportamiento mencionados por la experta.
«Para la sociedad, la familia funciona como institución cívica. La relación entre la sociedad y la familia es bilateral. La sociedad aporta normas, estándares, folclor y expectativas de funcionamiento. Es la familia quien ayuda a actualizar, innovar, mejorar y/o reestructurar esos elementos».
Karem González
Si conoces la canción, seguro habrás escuchado que: «la familia es una institución donde el individuo toma formación y si no formamos un mejor hogar, marchar bien no puede nuestra sociedad». Acá yace la importancia de formar individuos justos, honestos y responsables dentro de la familia, para que su papel en la sociedad prime por sus actitudes y comportamientos positivos.
Rol social en riesgo
Pero existen diversos factores en la familia que podrían poner en riesgo su rol social, como puntualiza la especialista, estos pueden ser:
- Traumas generacionales no resueltos
- Secretos en la familia
- Relaciones ambivalentes y disfuncionales entre las familias extensas.
Sobre estos factores, como sigue señalando la experta, «si la familia no responde a las exigencias sociales, es porque internamente como núcleo no puede sostenerse, hay conflictos entre los modelos de dirección. Niveles altos de ansiedad crónica dentro del sistema familiar son indicadores de una pobre madurez psicológica, y con ello un funcionamiento rezagado».
Podemos decir que la familia es la clave para que podamos construir una sociedad mas justa y moralmente positiva. Donde cada individuo que forme parte de ella sienta el compromiso de construir una sociedad caracterizada por la justicia, la verdad y la bondad.
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