Una vez más el señor Karl Lagerfeld nos envolvió con su escenografía y temática en el desfile de la maison Chanel. Para mostrarnos la colección prêt-à-porter otoño-invierno 2017-2018, nos trasladó a una estación espacial que denominó Chanel Ground Control. Allí, la vista estaba enfocada en un gran cohete en medio de la pasarela hasta que comenzaron a salir las modelos.
Y es que Lagerfeld es todo un experto en mezclar los clásico de la marca con esos toques más comerciales, sobre todo ahora, que está apostando a las millenials –se ha visto esto desde la selección de sus modelos hasta las piezas que ha incorporado en las últimas temporadas–.
El tweed fue el hilo conductor de la colección… manteniendo de esa forma el ADN de la marca en cada una de las salidas. ¿Qué varió? Pues la combinación de materiales y tejidos. Vimos vestidos de etiqueta, de cóctel, uno que otro jumpsuit y trajes de dos piezas.
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