El verano significa playa, sol y arena… bueno, no todos los días, porque tenemos que continuar nuestra jornada laboral como de costumbre. Sin embargo, nos gusta vernos con ese tono dorado en la piel para que todos crean que nuestro fin de semana fue bajo los rayos del sol frente a una paradisíaca playa.
Se vale soñar. Pero como no somos celebridades sin talentos –coloque el nombre de quien crea que vive esta vida soñada sin trabajar– debemos buscar trucos que nos ayuden a aparentar ese look bronceado tan deseado y codiciado.
Hay ciertos colores que ayudan a acentuar el tono de tu piel, así que toma nota para que estos sean tus aliados incluso en otoño e invierno.
Blanco
El color que mejor ayuda a resaltar ese bronceado tan buscado es el blanco. Le queda bien a todo el mundo. Es brillante y luminoso. Si dejas tus hombros al descubierto con este color, luego de haber tomado aunque sea unos rayitos de sol, nos vas a recordar.
Tonos cítricos (naranja, amarillo y limón)
Los tonos cítricos son una perfecta opción. Con relación al naranja, este ayuda a destacar los tonos marrones y dorados en la piel. Úsalo en sus diferentes tonalidades. Esto también aplica para los amarillos y los tonos limón, ya que le dan luminosidad a la piel.
Coral
Este color es característico del verano, y sin lugar a dudas, es nuestro aliado si queremos resaltar ese bronceado o vernos bronceadas. Le da a la piel un color rosáceo. También está el rosa frambuesa, fucsia y magenta.
Ya el verano casi termina, pero eso no significa que no puedas lucir bronceada fuera de la temporada de sol (aunque en el Caribe gozamos de él lo 365 días del año). Sácale provecho a los colores y úsalos según lo que quieras lograr.
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