Cualquier mujer que se acaba de convertir en madre o ya lo es desde hace un tiempo, puede dar fe y testimonio que un bolso para cargar todo lo que necesita la criatura, es más que un accesorio. ¡Es casi un elemento que salva vidas! Afortunadamente, hay personas que una vez dijeron “tenemos que facilitarles la existencia a todas esas madres”, poniendo toda su creatividad y talento para confeccionar bolsos que se ajusten a los diversos estilos de vida, presupuesto y personalidad. Le presentamos a una de ellas: Mónica Kalozdi, de Kalencom.
Sí, aquella mujer que en 2005 se convirtió en la única ciudadana de Nueva Orleans conocida por haber llegado a la cima del Monte Everest; también tiene como misión de vida diseñar y elaborar bolsos maternales que sean hechos con materiales de alta calidad, modernos y, más que nada, funcionales.
Cuando le preguntamos de dónde nace la idea de crearlos; explica que siempre fue una apasionada de la moda y de los colores, pero fue al convertirse en madre que tuvo el deseo – y prácticamente la musa necesaria- para crear un bolso que toda madre se sintiera, hasta cierto punto, orgullosa de llevarlo… pero, sobre todo, muy cómoda.
Una bolsa con muchos bolsillos
Atendiendo a esto último, Mónica no crea por crear. Detrás de su inspiración, existe una realidad que todo quien haya sostenido una conversación con ella; simplemente le dará la razón. “La madre moderna, más que nunca, es una persona segura que está altamente involucrada en muchas actividades diarias. Por eso, la de pañales Kalencom posee tantas características para facilitar la vida: desde un portabolsas aislado, otra pequeña bolsa con cremallera y muchos, pero muchos bolsillos”. De esta forma, la marca ofrece a las madres la dualidad de llevar casi una bolsa para ella y otra para sus bebés.
Ok… Revestida… pero “yo no he visto esas bolsas… ¿cómo son?” Pudiera preguntar más de una, y es bastante fácil describirlas: son bolsas con muchísimo espacio, que harán que honres el dicho de que “mujer precavida, más si es madre, vale por dos”. Cargarás con todo, superando cualquier imprevisto.
Lo mejor, es que no contienen sustancias azoicas. Es decir, no se fabrican con muchos de los químicos cotidianos de la industria textil en toda su cadena de producción, que van desde la tintura de los tejidos, hasta las impresiones y los acabados; y son calificados como “tóxicos”. Precisamente por ello, el saber que no usan flatato de dioctilo ni de dibutilo; así como tampoco BOP en ninguno de sus policloruros de vinilo, hace que cualquier madre/padre se sienta tranquilo de colocar en estos elementos los utensilios de sus hijos.
Pero, como siempre hay que dar cabida a la curiosidad; le solicitamos a Mónica que nos dijera cuál es la mayor diferencia entre Kalencom y todos los demás bultos como estos y nos respondió: “Nuestra esencia se basa en la calidad y funcionalidad, sin sacrificar la moda”; definiéndole como el máximo valor que ofrecen a sus clientes. Y añade: “No vendemos pelusas, no vendemos artículos de fantasía, vendemos lo que es verdaderamente esencial en una bolsa de pañales, tanto para la mamá como para el niño”.
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Uso extendido
¿Y por qué “tanto para la mamá”? Bueno, porque la edad promedio hasta la que son útiles para los niños es de 3-4 años; sin embargo, “luego puede continuar usándose para cargar la computadora portátil, irse de viaje, mochila… etcétera”, puntualiza Mónica.
Es decir que, en resumen, son bolsas supercómodas que incluyen accesorios esenciales para llevar todo lo del bebé, de forma ordenada y elegante. ¿Se puede pedir más? ¡Sí! Justo ahora están en oferta: en la tienda online del distribuidor de Kalencom en República Dominicana (www.agmercantil.com) tienen un especial de 45% de descuento, que incluye envío gratis a cualquier parte del país.
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