Estas temporadas vienen a refrescar nuestro guardarropa con tejidos ligeros y llenos de interesantes texturas.
En cuanto al color la paleta vuelve a los pasteles como cada año, pero si eres de las más atrevidas puedes optar por tonalidades llamativas como el neón. El rosa, amarillo, coral, verde menta, naranja, son los que no deben faltar en tu closet. El verde esmeralda es el color del año.
Mezcla texturas para dar un giro dinámico a tus combinaciones. Encaje con denim y hasta algodón con leather son solo algunas de las propuestas que encontrarás en el mercado, lo “chulo” es atreverse.
Los estampados florales siempre son protagonistas en estas temporadas, pero si prefieres ir más allá, opta por la geometría en tus prendas (cuadros y rayas son perfectos en este tiempo).
Una primavera-verano llena de mezclas, lo importante es atreverse a probar diferentes estilos.
